martes, 14 de marzo de 2023

LAS MUJERES DE MI PUEBLO

 Por Gustavo Torres. Secretario General CEHMAV


Diego Rivera. Retraro de mujer

La historia de las mujeres de mi tierra, comienza desde los tiempos prehispánicos, cuando este territorio se hallaba habitado por pluralidad de tribus que vivían en armonía con las creaturas y la naturaleza, en las cuales indomables guerreras, murieron junto a sus esposos por la defensa de sus posesiones a la llegada y conquista del imperio español al nuevo mundo. Ellas pertenecieron a las culturas ancestrales: Guambianos, Bolos, Calocotes y Calimas.

 

Un primer nombre llega hasta nosotros desde finales de la época Colonial, cuando nace en la hacienda Perodias, María Manuela Varona quien sería la esposa del sabio Francisco José de Caldas y en ella se cumple el adagio de que “Detrás de cada gran hombre hay una gran mujer; contrario a lo que se cree en la época de la independencia la mujer jugó un papel protagónico en la causa patriota en búsqueda de la libertad. En los orígenes de la localidad junto a los hacendados que lograron el surgimiento del curato en 1826 se destaca María Petrona Delgado esposa de don José Cipriano Lozano. Mientras que para el año de 1835 junto a la familia Bedoya, las señoritas Josefa y María Andrea tuvieron parte activa en el nacimiento de Florida como población del antiguo Cauca.

 

Entre los siglos XIX y XX época de intensos conflictos políticos, las mujeres estuvieron junto a sus esposos defendiendo los principios conservadores o liberales y en muchas de las ocasiones, tuvieron que huir de su territorio nativo por la violencia fratricida que se apoderó de los campos y ciudades como el actual Valle del Cauca, que fue meta de llegada de diferentes poblaciones del sur del país, de Antioquia, del Viejo Caldas y del litoral Pacífico. Las mujeres de la etnia Nasa por su parte, llegaron junto a sus familias del vecino departamento del Cauca ubicándose en territorios ancestrales de la Cordillera Central, donde nace el agua fuente de vida y donde conservan el equilibrio con la Pachamama.

 

Durante toda su historia de vida municipal, Florida solo ha tenido a dos mujeres como Alcaldesas en el siglo pasado, en aquella época cuando quien designaba este cargo era el gobierno departamental, ellas fueron María Elena Posso en el año de 1978 y la doctora Alba Conde de Barrientos entre 1986 y 1987, durante este último mandato se proyectaron obras de interés como la Avenida de la Paz, se dio inicio a las Ferias de San Antonio en el mes de junio y se lanzó el himno de ferias del municipio compuesto por Deisy Ortiz e interpretado por Sandra Patricia Valladares. Hay que destacar también el papel de Blanca Barney, esposa de don Norman Zuluaga Jaramillo, quien fue una de las primeras diputadas del departamento.

 

El protagonismo de la mujer floridana, no solo ha sido político, sino a su vez en diferentes campos del conocimiento y del servicio comunitario entre ellos la educación, la cultura y el deporte. Sería dispendioso nombrar esa pléyade de mujeres que han hecho historia en la localidad; es un trabajo aun por realizar, pero desde estas líneas me gustaría destacar sobre todo a Piedad Cobo Solarte, quien durante muchos años fue la bibliotecaria del municipio y Marely Ararat, quien fue la primera directora de la Casa de la Cultura Hernando Caicedo, entre otras docentes como la licenciada Nury Delgado Trujillo, quien participó junto a otros escritores del libro Florida, recuperando la Memoria Colectiva.